domingo, 6 de octubre de 2013

PARADERO DESCONOCIDO

O la transformación de una voluntad al poder


Estamos viviendo tiempos tempestivos en donde a fuerza de titulares de prensa somos informados de las diferentes fechorías que desde las esferas de poder cometen nuestros gobernantes atentando contra la dignidad de sus ciudadanos. Digo dignidad por no decir valores, moral, ética y cómo no "bolsillo".
 
Sirva esta disertación como presentación de una de las obras de teatro que más me han impactado este año (tras ver Rey Lear, fantástica adaptación de William Shakespeare; Temporada Baja, musical muy bien trabajado con un gran número de intérpretes y Despertarás ayer con una magnífica interpretación de Noelia Pérez).

Despertarás ayer, cartel publicitario.

El sábado por la noche tuve la ocasión de ir al Principal a ver Paradero desconocido, obra de Kressmann Taylor adaptada y dirigida con gran acierto por Laila Ripoll. Grandes estuvieron sus tres personajes con unas dosis de interpretación magistral en los momentos más emotivos. Brilló especialmente Juanjo Artero encarnando al germano Martin Schulse personaje que se transmuta a lo largo de la obra teatral.
Quedé pegada a mi butaca hasta llegar al final...

Durante toda la función, la obra teatral estuvo acompañada por una proyección de imágenes antiguas realizadas entre el final de la I Guerra Mundial y 1933 aproximadamente. Manos alzadas, soldados en trincheras, uniformes de las SS....



Tras el descanso de la noche y el sueño, ahora que transcribo mi pensamiento sobre la misma, me viene a la mente una de las frases más pronunciadas por el dictador Adolf Hitler durante su mandato: 
 

"Las grandes masas sucumbirán más fácilmente a una gran mentira que a una pequeña"

 
Y digo en calidad de ser pensante: ¿Quién puede resistirse ahora a no sentir cómo desde el poder público se nos manipula a diario con el discurso de nuestros representantes políticos? ¿Quién utiliza esas mentiras que nos dicen, verbigracia "las acciones de Bárcenas no las conocía la cúpula del PP", "las pensiones no sufrirán recortes", "la sanidad es insostenible"? Y... ¿para qué esas mentiras?

Y como ciudadana que soy, en una sociedad que vive al amparo de la manipulación del poder en su conjunto, únicamente me cabe decir con decepción y cautela:

AUNQUE LA HIENA DE HITLER HA MUERTO, SU MADRE SIGUE VIVA...

Reflexionemos sobre nosotros, nuestros valores y concretemos si son estos quienes nos gobiernan. O, nos dejamos llevar por "quienes orquestan el poder".
 
De momento, pensar es un ejercicio gratuito que rejuvenece la mente y el espíritu. Es la gimnasia que más me gusta practicar cada día. ¿Y la tuya, cuál es?
 

jueves, 3 de octubre de 2013

QUE CAMBIE LA DIRECCIÓN DEL IVAM... QUE YA ESTÁ BIEN

RESUMEN DE LA VISITA AL DEPARTAMENTO DE REGISTRO DEL IVAM REALIZADA POR ESTUDIANTES DE GRADO DE HISTORIA DEL ARTE
 
Somos un pequeño grupo de estudiantes que, dentro de la asignatura sobre las salidas laborales del grado de Historia del Arte impartida por el Dr. Villar, vamos a tener la oportunidad de conocer el IVAM por la “puerta de atrás” nunca mejor dicho…
 
Entramos y nos presenta a la responsable del Departamento de Registro, doña Cristina Molina, toda una experta en la materia. Tras darnos la bienvenida nos indica que con muchísimo entusiasmo que nos explicará los procesos del registro de todas las obras del museo, así como toda la documentación que se deriva del proceso:
- Transporte
- Seguro
- Inventario
- Custodia y almacenamiento de estas.
La primera referencia que nos indica es la seguridad que representan las puertas de incendio y la necesidad de permanecer cerradas a modo preventivo de cortafuegos.
Vamos a ir detallando los espacios que hemos encontrado a lo largo de nuestra visita y que, generalmente no son transitables por el público.

MUELLE DE CARGA

Es el muelle de entrada al museo. Se nos explica que es fundamental que exista movilidad para los camiones y el transporte de las obras de modo seguro. Así como una rampa de acceso que permita descargar las obras con seguridad y tracción mecánica. No “a peso” porque hay obras que pueden alcanzar perfectamente media tonelada o más.
Nos muestra la trampilla elevadora del muelle de carga y la grúa para cargar las obras.
Nos explica que el recorrido de las obras desde el origen (otro museo, casas particulares, galerías, etc.) hasta el destino (IVAM) tiene una documentación fundamental a rellenar y revisar.  El FACILITY REPORT forma parte de estos documentos.
Nos comenta que el IVAM tiene unas 13.000 obras en sus fondos. Ahora están realizando campañas importantes de descentralización para intentar derivar las obras a otros puntos y que puedan exponerse.


TALLER DE TRÁNSITO
Una vez pasamos del muelle de carga hacia el interior del museo nos encontramos con este espacio reservado a almacenar las obras que van a salir o a entrar al museo. Por tanto, están todavía embaladas cuidadosamente para que no sufran ningún golpe, rotura o accidente.
A partir de esta zona todo el museo está climatizado las 24 horas del día, los 365 días del año. Siendo la factura mensual de luz en torno a los 30.000 €.
Al fondo de esta sala se encuentra material de montaje y la sala de restauración.


Condiciones de mantenimiento de temperatura y humedad
Nos explica que a lo largo de nuestro recorrido hay una serie de recintos que deben estar en unas condiciones siempre fijas para evitar que las obras sufran:
Temperatura: 22ºC +/- 2º C
Humedad: +/- 50 %

SALA DE MONTAJE DE PIEZAS
Nos quedamos en la antesala del Taller de Restauración, están trabajando en piezas y es delicado transitar por allí. Concretamente donde montan las piezas para ser expuestas. Toda esta sala está climatizada y presenta materiales diversos para embalar y montar piezas. Vemos como las obras están organizadas en horizontal.

 

 
CÁMARA ACORAZADA
Supone todo un desafío poder entrar a observar esta zona tan restringida. Por supuesto las condiciones de humedad y temperatura son siempre constantes.
Hay zonas donde hay papel, otras fotografías, grabados, videos…

Existen unos PARTES DE LOCALIZACIÓN en donde se describe con total claridad dónde se encuentran las obras. Todas las piezas están etiquetadas con su correspondiente numeración. Si se retira la pieza, se deja la etiqueta en su sitio y se explica en el parte dónde está: en la sala de exposición, taller de restauración, etc.
Salimos de la zona de las cámaras acorazadas. Ahora vamos a conocer una sala donde se guarda material de exposición para ser reutilizado una vez se pone en condiciones de uso:
Vitrinas, cajas de embalajes, marcos, etc.
A veces dejan este material a otros organismos que necesitan hacer exposiciones.
Otras, una vez utilizado, llaman a empresas especializadas en el reciclaje de objetos y así no acumulan material que puede ser peligroso e inflamable.

PROGRAMA INFORMÁTICO
Existe un programa informático especial que permite datar y llevar un control sobre todas las obras desde sus orígenes hasta la actualidad. Cada ficha es como un diario de la vida de la obra, con un número de registro que permanecerá invariable para siempre, como el DNI de todos nosotros, así se identifica, con este número de inventario. (Cómo quisiéramos que esa ficha fuera totalmente accesible a investigadores y estudiosos...)
 
Por último, nos comenta tres aspectos fundamentales de la recepción de obras:
 1.- El "correo", que es el responsable que acompaña la obra desde origen hasta que se expone. Hay que coordinar perfectamente la documentación y el traslado y manipulación de la obra para evitar que se deterioren o que haya que hacer uso de reclamaciones innecesarias. Si las obras en origen tienen daños, el museo no tiene porqué "arreglarlas" en sus departamentos... 
2.- Antes de montar una exposición hay que pedir las medidas de las obras. Hay que comprobar que el trayecto que han de seguir desde el muelle de carga hasta la sala de exposición, les permite su montaje...
(Ya ha pasado que el IVAM ha adquirido obras que no pueden pasar del montacargas, están en el muelle durmiendo el sueño de los justos, con el dineral que se ha pagado por ellas...)
 3.- Existe un proyecto de remodelación que permitiría realizar mejoras en aspectos que se han quedado algo obsoletos para la logística interior del museo. Pero con la nula política de gestión de la responsable actual (a quien evito nombrar) y  consciente la ciudadanía de que el dinero del IVAM se gasta en fotos de "chinos mafiosos" y en obras que no caben por ningún lado ¿de dónde van a sacar "los dineros "para el presupuesto? ¿De las cuentas opacas que tienen los políticos corruptos en Suiza?


Como conclusión quisiera decir que ha sido muy ilustrativo poder conocer de primera mano esta parte tan interesante y poco accesible del museo. Desde que lo visitaba hacía casi 16 años, es el espacio que más me ha emocionado hasta la fecha... Y qué decir de la gran profesional de la disciplina de la Historia del Arte que nos ha brindado su tiempo para enseñarnos esta parte del IVAM y dignificar su labor en la medida de lo posible.

Lo que hace la actual dirección ya lo sabemos todos... el ridículo. Pero, no hay que decirlo muy alto, no sea que toma represalias y me cierren el "blog".
 
Quiero dar las gracias a los dos responsables de este encuentro, por ofrecernos una experiencia así.
Los anónimos son quienes levantan el país cada día con su trabajo bien hecho.

HUERTOS DE NARANJOS. VISIONES CULTURALES DE UN PAISAJE.


ENCUENTROS CON LA MEMORIA ÁCIDA Y DULCE DE UNA NARANJA RECIÉN COGIDA DEL ÁRBOL


El día 24 de febrero de 2013 sobre las 12:00h me disponía a escuchar un concierto de cuerda muy cerquita del Jardí Botànic. Haciendo tiempo descubrí primero una misa ortodoxa celebrada en una capilla de un antiguo colegio católico. El fervor de aquellas personas me sobrecogió de manera inusual y en ese estado de meditación y recogimiento entré en la exposición “Huertos de naranjos. Visiones culturales de un paisaje”, comisariada por Adrià Besó, profesor en el Departamento de Historia del Arte de la Universitat de València.

 
  
Casualmente me encontré sola en la sala y al comenzar a contemplar el conjunto creado con los paneles en fondos de plata, las numerosas fotografías y las proyecciones en blanco y negro, me transporté a un tiempo pretérito en donde el paisaje natural valenciano se modificó por la actividad humana en un vergel susceptible de producir, de dar riqueza a través de la industrialización del mercado de la naranja…

Según explica Adrià Besó “no es una exposición sobre la naranja, o sobre el naranjo, sino sobre las visiones del paisaje del naranjal por parte de las diferentes formas de expresión artística. Un nuevo paisaje arraigado en la tradición cultural valenciana del huerto-jardín que transformó los secanos próximos a las llanuras litorales hasta convertirlo en un auténtico vergel. Esto es un testimonio ilustrativo que la transformación necesaria del paisaje que se produce cuando finalizan los ciclos económicos no debe significar siempre su destrucción o urbanización, sino que puede dar resultados sorprendentes y de una gran calidad estética, como ocurrió hace más de cien años con los huertos de naranjos”.


 



 
Los puntos de reflexión que proponía la exposición me llevaron a profundizar
sobre nuestro paisaje, el autóctono nuestro, el del naranjo, como verdadero mantenedor de toda una economía de subsistencia para todos aquellos afectado por la crisis. El carácter “meninfotic” del pueblo valenciano hace que esta riqueza se esté transformando y perdiendo.

Tuve la ocasión pues de pasear entre 1880 y 1930 por naranjos y huertos gracias a esta exposición. De conocer cómo el huerto jardín valenciano se transformaba por razones comerciales en un huerto productor de naranjos. Explicaron como el huerto canónico burgués recogía no sólo el preciado fruto sino también el calor de sus habitantes en magníficas residencias.

Las alfombras verdes de naranjos que bordean la A7 hacia Alicante también fueron inmortalizadas por la exposición desde los albores de su nacimiento… Cuántas personas dedicaron sus vidas a eso cultivos, con cuanto cariño y sabiduría realizaron su trabajo porque aún hoy es visible...

Sabemos que estos paisajes fueron fuente de inspiración de pintores, poetas y escritores. Casi todos han pervivido sin cambios demasiado sustanciales hasta hace relativamente poco. En nuestros corazones y en nuestros bolsillos sabemos el daño que sobre el territorio ha realizado la especulación urbanística... Se hacen inevitables en la retina del espectador las comparaciones de estas imágenes de antaño con las actuales, campos con árboles repletos de frutos sin recoger, con las naranjas desperdigadas por el suelo muriendo una a una...




Y en mi caso no me queda otra que abandonar la idea de asistir al concierto.

Es hora de actuar de buscar un campo de naranjas abandonado, de recoger todas las que pueda del mismo para que no se pudran y mueran…

Es hora de hablar con los Ayuntamientos y que se hagan “collas de apadrinamiento” en donde aquellos hombres y mujeres que están pasando necesidad puedan acudir a esos huertos abandonados para recoger lo que sus dueños dejan perder de forma irremediable…

Puede que el ciclo de la naranja como monocultivo intensivo haya llegado a su fin en aquellas comarcas donde comenzó de forma temprana y es por esta misma razón que hemos de reinventar su uso: alacena de los más necesitados. Y dejar la conversión en suelo urbanizable y los árboles maderables para otros tiempos.

  


¡SEÑORES AMOS Y POLÍTICOS MUNICIPALES, AHORA TOCA COMER!
QUE PAGAR YA NO PODEMOS MÁS...